Aurore Haas

Simpática por obligación y manipuladora por profesión. Es una chica capaz de hacerse una buena compañera de muchos, diciéndoles aquello que desean escuchar. Forja alianzas que usará siempre a su favor y tratará de evitar conflictos mayores... si puede. Tener a todo el mundo comiendo de la palma de su mano es un juego para ella, uno que está dispuesto a ganar. No mostrará más que su cara bonita, un par de sonrisas y halagos, sin excederse. Intentará sacar provecho de la amistad que mantiene contigo o simplemente no serás más que otro al que pisará cuando crea conveniente. Fiarse de ella es un error, pero un error inevitable para la gran mayoría.

Sus amigos son aquellos que han logrado complacerla en más de una ocasión, ya sea con charlas interesantes o con una personalidad interesante. Dejará de mostrarse falsamente simpática y pasará a ser una chica sencilla que brinda ayuda y apoya en cualquier momento; un buen pilar para malos momentos. Sus locuras te encantaran, pues serán pura diversión. Tiene grandes ideas para sus amigos más cercanos, así como una coraza de férrea protección.

Cuando llegas a tocarle la vena sensible, verás que Aurore es una auténtica persona con ganas de comerse el mundo. Las tardes de locuras cesarán y en su lugar vendrán los momentos para compartir confidencias, cotillear y, en definitiva, vendrá la sinceridad. Si Aurore te considera su mejor amigo o alguien digno de confianza, no la defraudes, pues ella te considerará una persona estupenda y alguien a quien admirar. Te querrá y te protegerá con recelo e incluso hará todo lo posible para que estés contento. Traiciónala y te convertirás en una persona non-grata, aunque siempre muestre lo contrario, pues sabe que para hundirte hay que tenerte cerca.

Las relaciones amorosas no son el plato fuerta de Aurore. Con pocas ganas de entablar algo íntimo -muy probablemente porque nadie le ha llegado al corazón- será un blanco difícil si realmente sientes algo más que "una noche de rollo". Verás que siempre es coqueta, le gusta ser el centro de atención y no dudará en hacer todo lo posible por conseguirte si encuentra en tí algo que ha sido de su agrado. Olvídate de negárselo; no podrás. Duda mucho encontrar el amor en la universidad, pero como solo lo ha sentido una vez no es capaz de actuar bien. Probablemente seas su rollo pasajero y tratará de hacerte marchar de su lado para ver si podría haber algo más o no. Complicada, en el fondo.

Madre inglesa y padre francés, nacida en París el 1992. Desde muy pequeña ha mostrado dotes de modelaje, siendo uno de sus primeros sueños: Trabajar como modelo para las marcas parisinas más importantes. Su sentido de la moda probablemente viene de la gran afición de su madre por vestir según las últimas tendencias. Ha aparecido en algunos anuncios televisivos sobre ropa de niños, gracias a su belleza y al poder económico así como influencias de sus padres. Pocos años después, a la edad de los ocho, pierde a su madre en un accidente de tráfico que, en fin, no parece ser tan accidentado como lo pintan.

Su padre nunca había sido parte de su vida, pues siempre ha estado trabajando en la compañía familiar -maquillaje, ropa y productos alimentarios-. Llegados a este punto, las cosas cambiaron radicalmente. Al ver que su hija lo necesitaba, no dudó en dejar aparcados sus negocios durante un breve tiempo, poniéndolos en manos de una joven empresaria con grandes dotes para el manejo de empresas. Aurore seguía sin mostrar muchas ganas de v olver al mundo de las modelos, por lo que empezó a buscar alguna otra cosa que hacer y dio con ella. Le fascinó la forma en que los arquitectos hacían realidad los planos de obra y empezó a interesarse por el tema, acabando de desarrollar un fuerte gusto por la mecánica con apenas catorce años. Al ver que su hija se hallaba recuperada de la pérdida de su madre, su padre volvió a la empresa.

Los siguientes años fueron aburridos, en cierta forma. Fue enviada a un internado en Londres para niños pijos y ricos y allí aprendió a usar su belleza y las palabras para conseguir comerse dos helados. Chicos... eran tan fáciles de engañar. A la edad de los quince una noticia chocante llegó a sus oídos: Su padre se iba a casar, con una mujer veinte años más joven que él. Dicha señora no era otra que la joven empresaria en quien había confiado su empresa años atrás. A pesar del mal comienzo que tuvieron Aurora y su madrastra, ésta le demostró que iba a hacer todo en cuanto estuviera en sus manos para ganarse la confianza de la hija. Y así fue, pues dos años más tarde eran como dos hermanas inseparables hasta que llegó el momento de iniciar una nueva etapa en la vida de Aurore: La universidad.

La elección de la universidad de Hardvard fue meramente al azar. Había muchas universidades que estavan dispuestos a acogerla; sus notas demostraban un nivel alto en los estudios y un buen rendimiento académico. Decidió, pero, que marcharse a EUA era una buena forma de empezar a labrarse una vida y estar un poco lejos de la influencia de su apellido. Allí se encontró algo impensable: Un clon de ella misma; una hermana gemela aparecida de la nada. Aquello fue el colmo de los colmos para Aurore, pues nunca se hubiera imaginado en semejante situación. Al parecer, según le contó su padre, habían nacido dos niñas, pero una había sido dada por muerta y muy probablemente vendida en el mercado negro de bebés. La reacción no fue más que un boom y, Abbigail, su gemela, no dio muchos problemas, pues solo quería conocer a su verdadera familia y puras casualidades del destino. No hubo reclamos económicos ni de ningún tipo, salvo que se hizo muy buena amiga de Aurore en poco tiempo. Hermanas...

Tras un año de fuertes emociones en Hardvard, decidió volver a Inglaterra e inscribirse en l Nightove college, pues quería estar cerca de su familia, al igual que su gemela. Así, pues, ahora empieza un nuevo curso...